Cuando los clientes nos piden digitalizar la seguridad y salud de su organización, uno de los puntos claves es la formación de los trabajadores. Y dentro de este campo, un punto crítico es el de la formación a los nuevos empleados, el plan de acogida o de onboarding.

Y lo es por dos principales motivos:

• En primer lugar, por el tiempo que invertimos en formar a nuevos empleados. En empresas en los que hay una rotación importante de trabajadores, o que están en un momento de punta de trabajo que requiere incorporaciones de personal, las horas destinadas a formar a estos nuevos y nuevas integrantes de la organización son muy importantes. Tanto, que más de un responsable de SST nos ha confesado que van con la lengua fuera por este motivo.
• En segundo lugar porque los planes de acogida son procesos tremendamente claves a la hora de asegurar la continuidad de las personas en las organizaciones. Según un estudio de Allied HR, el 25% de los abandonos de nuevos empleados sucede en los primeros 45 días. Y el 70% de los recién aterrizados en una empresa toman la decisión de quedarse o marcharse en los seis primeros meses, tal y como pone de manifiesto otro estudio del Human Capital Institute (HCI).

Un plan de acogida es el protocolo creado por una empresa para recibir a un empleado nuevo. Se trata de un documento estratégico que pretende explicar el proceso de incorporación del trabajador a la compañía.

Cada vez más podemos observar empresas que tienen digitalizados estos planes (total o parcialmente), y por mucho que exista la creencia de que solo se puede virtualizar la formación en industrias poco peligrosas, conocemos una gran cantidad de casos en los que se utilizan las plataformas digitales para formar a los nuevos empleados. En la mayoría de estos casos se complementa la formación online con instrucciones en el propio puesto de trabajo, con lo que conseguimos el mismo resultado, pero con un ahorro importante de tiempo, gracias a disponer de buenos materiales formativos que ayudarán a la persona de nuevo ingreso a comprender cómo hacer su trabajo, y a llevarlo a cabo de forma segura.

No hace falta hablar de los beneficios de digitalizar los planes de acogida:

• Unificación de criterios a la hora de realizar la formación de on boarding (evitamos que uno explique “su” forma de trabajar y otro lo haga de forma distinta)
• Posibilidad de visualizar operaciones previamente filmadas que no se dan en el día a día habitual (mantenimiento, limpieza, etc)
• No invertir tiempo en explicaciones que siempre son las mismas
• Impactar al nuevo empleado con un buen material formativo
• Conocer en tiempo real las formaciones realizadas en mi organización

Un informe de Aberdeen Group constató que un proceso formalizado de onboarding incrementa en un 69% la probabilidad de que el nuevo empleado se quede al menos tres años en la organización. Con lo complicado que es hoy en día encontrar personal cualificado, cualquier inversión en este proceso es fundamental.