Las charlas de seguridad se han convertido en elementos indispensables en cualquier organización con una cierta madurez en cultura preventiva.
Estamos hablando de diálogos cortos, de 5 a 10 minutos, generalmente realizados antes de empezar los trabajos, en los que se trabaja con todo el equipo un tema relacionado con la seguridad. Se suelen comentar situaciones que han ocurrido durante la jornada anterior para corregirlas, cómo planificar ciertos trabajos de riesgo, cómo realizar una operación en concreto, o simplemente hablar sobre seguridad para que este sea uno de los temas que estén en el top of mind de los integrantes del equipo.
Se ha demostrado que ayudan a que los trabajadores sean conscientes de lo que hacen y de las consecuencias que sus acciones pueden tener. Y con todo ello se consiguen interesantes beneficios, como por ejemplo:
- Reducción de los índices de accidentabilidad.
- Aumento de la participación de los empleados.
- Mejora de la productividad, por disminución de errores e incidencias.
En definitiva, se considera que las charlas de seguridad suponen, por su brevedad, su estilo sencillo y directo y por su eficacia en captar la atención y fomentar la participación del personal, uno de los medios más eficaces para corregir las prácticas de trabajo incorrectas y formar una conciencia en cultura preventiva.
Os dejamos un interesante caso de éxito de la empresa MTORRES en el que podréis ampliar información al respecto.
Las herramientas informáticas, como SmartOSH, resultan de gran apoyo a la hora de implantar un programa de charlas de seguridad. Podemos registrar las distintas charlas, monitorizar su incidencia, contar con una serie de avisos cuya publicación quedará controlada a través del software, etc.
En el siguiente link podrás descargar la guía gratuita de las 125 ideas para iniciar una charla de seguridad, un manual que seguro te resultará de gran ayuda.